El cobre está preparado para su mejor trimestre desde 2010, ayudado por el optimismo sobre un repunte de la demanda más fuerte de lo esperado en el principal consumidor de China y las crecientes preocupaciones por el suministro en América del Sur.
En la actualidad el cobre ha cobrado vital importancia. Convirtiéndose en el metal predilecto de la industria por su uso en transporte, construcción y aparatos tecnológicos. A futuro se espera el incremento exponencial en su utilidad hacia una revolución verde, ya que las energías renovables requieren 5 veces más cobre que los sistemas convencionales.