El pasado 9 de octubre del 2024 el Diario El Comercio público un artículo titulado “Petróleo en alza: ¿Superará los US$80 por el conflicto en Medio Oriente?”. En este artículo se cita al Dr. Arturo Vásquez Cordano, Profesor Principal y Director de Investigación de la Escuela de Postgrado GĚRENS, y exviceministro de Energía, quien ofrece un análisis minucioso acerca de las repercusiones que causan las tenciones en el Medio Oriente al precio del petróleo.
En el contexto actual de la economía global, el pasado mes de octubre de 2024, el mercado del petróleo se convirtió en un tema de gran relevancia, especialmente tras la reciente escalada de tensiones en el Medio Oriente. El ataque de Irán a Israel, que involucró el lanzamiento de más de 200 misiles, ha desencadenado una serie de reacciones en el mercado energético, conduciendo a un aumento significativo en el precio del barril de petróleo. Este escenario generó un impacto relevante en los precios del crudo, llevando el barril de petróleo West Texas Intermediate (WTI) a un pico de US$ 77.14, aunque posteriormente padeció una caída del 4.6%, situándose en los US$ 77.14.
El reciente incremento en el precio del petróleo se vio impulsado por la creciente incertidumbre en el mercado internacional, provocada principalmente por las tensiones geopolíticas. Las declaraciones del Presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, sobre el apoyo a Israel en caso de un ataque a las instalaciones petroleras iraníes, han generado un clima de nerviosismo entre los inversionistas. Según el Dr. Arturo Vásquez, este acontecimiento podría conllevar a que el precio del barril de crudo se dispare a más de US$ 100 en un contexto de conflicto, lo que subraya la sensibilidad del mercado a las dinámicas geopolíticas.
El Dr. Arturo Vásquez también destaca que la posibilidad de una respuesta militar de Israel contra la infraestructura petrolera de Irán es un factor que podría influir significativamente en los precios del crudo. En sus palabras, «ya se está estudiando dónde apuntar y no se hablan de instalaciones nucleares, sino petrolíferas para, en este caso, poder debilitar la parte económica de Irán». Este enfoque estratégico podría tener un impacto profundo en la economía iraní y, por ende, en el suministro global de petróleo.
En cuanto a las proyecciones de precios, el Dr. Arturo Vásquez señala que un ataque a la infraestructura petrolera de Irán podría aumentar el precio del barril en aproximadamente US$ 15. Esto es significativo, dado que la producción de Irán asciende a 3,8 millones de barriles diarios. Según el Departamento de Estudios Económicos de Scotiabank, el precio del barril de petróleo WTI podría elevarse hasta los US$80 en el corto plazo si los conflictos en el Medio Oriente se intensifican y provocan interrupciones en el suministro.
No obstante, el Dr. Arturo Vásquez advierte que cualquier incremento en los precios sería manera temporal. Explica que, «sería a corto plazo (si se da el alza), podrían ser dos a cuatro semanas, un mes más o menos que pueda subir el precio del petróleo, hasta que el mercado se adapte». Esta afirmación resalta la naturaleza volátil del mercado petrolero y la capacidad de los actores del mercado para adaptarse a nuevas realidades.
El Dr. Arturo Vásquez también menciona que la tendencia a largo plazo sugiere una estabilización del precio del petróleo entre los US$ 60 y US$ 70 por barril. Esta proyección se basa en la creciente oferta de petróleo a nivel mundial, con la participación de países como Estados Unidos, Rusia, Brasil y Argentina, que están aumentando su producción. Esta mayor oferta podría contrarrestar cualquier incremento significativo en los precios, lo que es un punto determinante en el análisis de la dinámica del mercado de hidrocarburos.
Además, la situación económica de China que ha mostrado una menor demanda de crudo y la posible decisión de Arabia Saudita de aumentar su producción, son factores que también podrían influir en la trayectoria futura de los precios. El Dr. Arturo Vásquez hace énfasis que «la tendencia a largo plazo es que el precio del petróleo se estabilice», lo que sugiere que, a pesar de las tensiones actuales, el mercado tiene mecanismos de ajuste que podrían mitigar los efectos de los conflictos geopolíticos.
La tendencia alcista de los precios del petróleo no solo afecta a los países productores, sino que también tiene repercusiones en la economía global. Un aumento en el precio del crudo puede llevar a un incremento en los costos de producción y transporte, lo que a su turno puede traducirse en un aumento en los precios de los bienes y servicios. Esto podría generar presiones inflacionarias en diversas economías, especialmente en aquellas que dependen en gran medida de las importaciones de hidrocarburos.
Finalmente, el mercado del petróleo se encuentra en un momento crítico, con la posibilidad de que los precios superen los US$ 80 por barril en el corto plazo debido a la inestabilidad en el Medio Oriente. Sin embargo, la tendencia a largo plazo sugiere que los precios podrían estabilizarse en un rango más bajo, influenciados por un aumento en la oferta y una disminución en la demanda. El análisis del Dr. Arturo Vásquez resaltan la complejidad del mercado petrolero y la interconexión entre la política internacional y la economía global.
La capacidad de los actores del mercado para adaptarse a las condiciones cambiantes y la influencia de factores externos, como la producción de otros países y la demanda global, serán determinantes en la dirección futura del mercado. En un mundo cada vez más interconectado, las decisiones tomadas en una región pueden tener repercusiones en el resto del planeta, haciendo que el seguimiento de estos eventos sea esencial para cualquier analista o interesado en la economía global.
Lima, 9 de enero de 2025.
Dirección de Investigación
Escuela de Postgrado GĚRENS
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