Acaba de ser publicado el informe anual sobre la pobreza en el Perú 2023 por el INEI- Instituto Nacional de Estadística e Informática. El informe muestra cifras alarmantes sobre el incremento de la pobreza monetaria en el Perú, lo cual constituye una «catástrofe económica» para el país. Antes de la pandemia, el Perú había logrado un «milagro económico», reduciendo la tasa de pobreza desde 70% a 20% en 30 años. Ahora, la tasa subió a 29%, habiéndose retrocedido 11 años en la lucha contra la pobreza.
Lamentablemente, los rezagos de la pandemia del COVID-19, el populismo abierto e ideológico, la crisis de la seguridad ciudadana, la alta inflación por 30 meses, los fenómenos climáticos, el aumento del crimen y la informalidad, el aumento del estatismo y la corrupción, así como el aumento de la minería ilegal y el narcotráfico promovidos por el Gobierno de Pedro Castillo y por el Congreso en los últimos tiempos han producido una recesión significativa y han deteriorado gravemente el clima de inversión, la calidad de las políticas públicas, la confianza de la ciudadanía en su país, la calidad de la educación, y el deterioro del grado de inversión. También se han visto afectadas negativamente las medidas de reducción de las brechas sociales y el alivio a la pobreza.
La pobreza energética también se ha incrementado de manera dramática. El 46% de la población peruana utiliza combustibles contaminantes para cocinar (leña, carbón, bosta, estiércol) y el 51% de la población tiene un acceso inadecuado al servicio eléctrico.
Es URGENTE dar un giro timón en la política económica, apuntando a la promoción de la inversión privada como palanca del crecimiento económico sostenido, que permitirá reducir la pobreza a largo plazo. Asimismo, se debe impulsar el desarrollo de infraestructura para reducir las brechas sociales, e incrementar la seguridad ciudadana y la lucha contra el crimen. Se debe promover también la sustitución de combustibles contaminantes por combustibles limpios como el gas natural y el GLP a través de los mecanismos de inclusión energética focalizados como el FISE y la política de masificación del gas natural, garantizando precios accesibles para aliviar la pobreza energética.
El informe completo está aquí