¿Cómo aseguran las minas una transición sostenible a la etapa post-cierre y cómo reducen el impacto del cierre de las minas en las comunidades locales?
El paisaje australiano está salpicado de pueblos abandonados que se establecieron en el tiempo, con los auges mineros. Estas ciudades se construyeron con la esperanza de prosperidad, con buscadores de fortuna que provienen de kilómetros a la redonda, incluso cruzando mares, para establecerse y unirse a la comunidad. Desafortunadamente, solo hay una certeza cuando se trata de minería: los recursos extraíbles comercialmente se agotarán en el sitio, y cuando esto sucede, es inevitable que la gente se vaya, lo que conlleva la evaporación y poca sostenibilidad de las economías locales.
Para ser verdaderamente sostenible, el sector de recursos debe planificar el crecimiento económico pensando en las generaciones del futuro. Para lograr esto, resulta necesario enfocarse en dos frentes principales:
- Usar las operaciones mineras para diversificar la economía local.
- Identificar y planificar un beneficio socioeconómico de reemplazo después del cierre de la mina.
Diversificar la economía local durante las operaciones
La industria minera tradicionalmente tiende a enfocarse en sí misma. Ocasionalmente, los programas de desarrollo local suelen implementarse de tal manera que la entidad y/o el propietario del activo obtengan beneficios directos, como:
- Prácticas/entrenamiento para proporcionar la próxima generación de técnicos mecánicos que brinden servicio a la flota de vehículos de la mina
- Una corporación minera que pueda crear una amplia gama de compañías locales para actuar como proveedores cercanos y rentables.
Si bien estos programas brindan beneficios a las comunidades locales a través de habilidades y desarrollo económico, su naturaleza enfocada a sí misma significa que tienden a aumentar la dependencia de la comunidad con la mina.
Un mejor resultado a largo plazo para la comunidad, es que la compañía minera apoye el desarrollo de una industria alternativa viable (o dos), idealmente industrias que no dependen de la operación minera y que aprovechan otros atributos locales.Puede haber algunas razones que expliquen porqué tales industrias alternativas no prosperaron antes en la región, y la minería puede actuar sobre alguna de esas barreras. Por ejemplo:
- La infraestructura a menudo se moderniza para dar servicio a la mina, lo que aumenta el acceso de la ciudad o del poblado a mercados externos más grandes.
- La inmigración puede aumentar los números residentes locales, aumentando el tamaño del mercado local.
- Como corolario de esto, también se pueden importar diferentes conjuntos de habilidades hacia la región.
Al considerar el desarrollo de un proyecto minero como una oportunidad para que la región supere algunas de estas barreras de mayor alcance, la operación puede contribuir a una economía local diversificada y sostenible, donde la minería todavía juega un papel clave, pero no es el único actor. En el proceso, puede eliminar el riesgo de una interrupción de la operación dirigida por la comunidad. Se trata de alinear el plan de gestión de cambio con el plan de relaciones comunitarias y el plan de desarrollo económico local.
Planificación para el beneficio posterior al cierre
Además de desarrollar diversos beneficios económicos durante la vida útil de una mina, las compañías mineras pueden ayudar a proteger al poblado o la ciudad de los impactos adversos del cierre mediante la planificación anticipada y un cambio de mentalidad, tratando el cierre como una oportunidad potencial, en lugar de una onerosa . He allí lo valioso de contar con profesionales con visión de innovación, habilidades directivas y capacidad de planificar en base a gestión para el cambio.
El proceso por el cual un sitio pasa de una operación minera a un sitio cerrado con éxito es relativamente conocido dentro de la industria minera australiana y existen pautas de «mejores prácticas» disponibles. A pesar de esto, el número de arrendamientos mineros en Australia que se han devuelto formalmente al estado en Australia, son pocos y están distantes unos de otros.
Una de las razones clave para esto, es que el uso de la tierra posterior al cierre, a menudo sigue siendo una decisión tardía, lo que implica fallas en la administración estratégica y gestión estratégica del sitio. Muchos de los ejemplos de reutilización exitosa de minas han ocurrido en sitios que no han estado funcionando durante muchos años. Las actividades de reutilización pueden haber sido creadas de manera apresurada u oportunista: Tal vez una compañía minera ha tratado de generar algunos ingresos para compensar la posibilidad de costos prolongados de administración de tierras o una empresa emprendedora (fuera de la industria) ha reconocido un activo único y ha propuesto una solución.
Una forma de desafiar esto, es viendo el cierre como una oportunidad y no como una obligación. Esta mentalidad debe adoptarse desde el comienzo de la vida útil de una mina (en la fase de planificación), no cuando la mina se dirige hacia el final de la producción.
La mayoría de las minas tienen un carácter único que puede proporcionar oportunidades que las tierras normales no pueden ofrecer. En general, también tienen una excelente infraestructura que incluye energía, transporte y servicios para respaldar un nuevo propósito del sitio. Si se produce un cambio de mentalidad y los sitios se consideran como un activo continuo en lugar de un pasivo, puede haber una serie de oportunidades socioeconómicas sostenibles que podrían planificarse con anticipación y realizarse después del cierre, asegurando así la sostenibilidad continua de la comunidad que se desarrolló junto a la mina.
Conclusión
Como industria, podríamos estar al borde de un cambio en la forma en que pensamos sobre los sitios cerrados. De hecho, existen ejemplos aislados de oportunidades que se implementan en los sitios antes mencionados y son la demostración del concepto. Sin embargo, no estamos viendo que las empresas implementen un proceso estructurado para identificar e implementar oportunidades específicas del sitio después del cierre, lo que implica hacer una revisión en el perfil de competencias de quién lideraría la operación hacia el cierre y sus habilidades gerenciales para desarrollar una buena gestión de cambio. Tal proceso comienza con una perspectiva externa y la comprensión de que los sitios mineros pueden continuar contribuyendo a los beneficios socioeconómicos continuos más allá de la vida de una mina.
Las opiniones expresadas en este artículo son las opiniones del autor, no de Ernst & Young. Este artículo proporciona información general, no constituye asesoramiento y no se debe confiar como tal. Se debe buscar asesoramiento profesional antes de tomar cualquier medida basándose en la información. Responsabilidad limitada por un esquema aprobado bajo la Legislación de Normas Profesionales.
Autor:Terence Jeyaretnam. Texto adaptado y traducido de Bulletin 2019. Traducido por GĚRENS, Octubre 2019.
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