El rápido ritmo de cambio en el mundo digital está impulsando la necesidad de que las empresas se vuelvan ágiles y se adapten a los rápidos cambios en el mercado. Se trata de ser rápido y flexible, crear la cultura empresarial adecuada y poner a sus clientes en primer lugar, sin dejar de ser rentable.
Metodología empresarial ágil
Los enfoques ágiles para proyectos han estado en uso durante más de una década, principalmente por parte de los equipos de desarrollo de software. El enfoque ágil se diferencia por el uso de ciclos cortos pero regulares que ofrecen resultados a los usuarios. Esto permite procesos más ligeros y flexibles que maximizan el tiempo dedicado a tareas de valor añadido directo a través de una estrecha cooperación con el cliente y la mejora continua a través de la retroalimentación.
Enfoque ágil de la planificación estratégica
Los pequeños cambios incrementales continuos y la evaluación periódica reducen el riesgo de implementación y facilitan la detención de proyectos no rentables antes de que incurran en grandes pérdidas. La flexibilidad para revisar y volver a priorizar los proyectos en una etapa temprana es esencial.
Después de haber visto los beneficios que se ofrecen dentro de los departamentos de TI, las organizaciones ahora están comenzando a adoptar la metodología ágil a nivel empresarial e implementar formas ágiles de trabajar en toda su organización.
Los equipos ágiles más exitosos serán aquellos que se tomen el tiempo para comprender cómo es un proceso ágil disciplinado. Lograr el mejor resultado comercial combinará técnicas tradicionales, disciplina y flexibilidad para proporcionar un enfoque que sea transparente, confiable y ágil.
Es probable que una actitud de «no planificamos, somos ágiles» haga que un proyecto pierda el rumbo y, en última instancia, fracase. Cierta formalidad y planificación son esenciales: si el desarrollo ágil abandona toda la disciplina del proyecto, es poco probable que ofrezca un tiempo de comercialización más rápido, costos reducidos, menor riesgo y mayor flexibilidad.
La simplificación es la clave
Muchas organizaciones tienen estructuras excesivamente complejas con demasiadas capas que complican el negocio, y una cultura que se caracteriza por el miedo al fracaso y la resistencia al cambio. Para obtener lo mejor de la metodología ágil y ofrecer todos los beneficios, se necesita una cultura ágil en toda la organización.
Esa cultura está significativamente influenciada por el liderazgo, por lo que esto significa que la gerencia necesita un plan integral para gestionar las expectativas de la empresa, aliviar la resistencia al cambio, fomentar la motivación y promover las habilidades y el comportamiento necesarios para ser ágil.
Una empresa del futuro es aquella que entiende la dinámica cambiante entre la empresa, sus empleados y clientes y puede hacer frente al cambio constante mediante la creación de entornos flexibles, ágiles y descentralizados que pueden ejecutarse de forma autónoma, pero que trabajan para lograr una visión compartida y clara. El mundo digitalmente mejorado y ricamente conectado en el que vivimos hoy en día crea nuevos desafíos y oportunidades para diseñar una colaboración y comunicación efectivas para esta forma de trabajar.
Entorno empresarial ágil
Las organizaciones deben aprender a aprovechar mejor la TI para trabajar de forma digital y autónoma. En lugar de un conjunto dispar de actividades en las que cada persona trabaja de forma independiente, hacer que todos trabajen juntos para co-crear contenido y soluciones significativas puede ser más efectivo para su negocio. Colaborar con otros ayuda a ir más allá de lo obvio y crear soluciones únicas, a la velocidad del ahora. Los equipos están conectados mediante herramientas de visualización lean.
La solución adecuada proporciona capacidades de valor añadido, como la gestión de los flujos de trabajo, el aumento de la colaboración entre los grupos de trabajo y la posibilidad de que los creadores de contenido se autopubliquen. Hace que el progreso sea rápido y sencillo. Permite a los usuarios personalizar fácilmente sus puntos de vista sobre problemas complejos y comprenderlos compartiendo múltiples dimensiones de conocimiento, actualizadas por los colaboradores en tiempo real. Es esta transferencia de conocimiento, más que la TI en sí, la que mantendrá a las empresas efectivas, competitivas y ágiles en el futuro.
Gestión empresarial ágil
Las empresas están bajo presión para transformarse digitalmente. Las nuevas tecnologías son vitales para mejorar la agilidad. Adoptar un enfoque ágil para proyectos y programas produce resultados de mayor calidad, en menos tiempo, a menor costo y riesgo. Esto se debe a que con la metodología ágil te mantienes enfocado en lo que importa y te adaptas continuamente a la información más reciente, no a lo que predijiste al principio.
Se trata de centrarse en lo que demanda el cliente, en lugar de buscar “vender lo que tengo” y eliminar o reducir la actividad que consume recursos sin añadir realmente ningún valor. También hace que el trabajo sea más gratificante y agradable, lo que significa una fuerza laboral más comprometida, lo que lo impulsa hacia una cultura que atrae a la próxima generación de artistas estrella. Agile ofrece a los líderes un marco para mantener un equilibrio entre la gestión del negocio y el cambio del negocio para garantizar el crecimiento a través de la innovación.
Este artículo ha sido publicado originalmente en Sharp Cloud. Ha sido publicado y traducido por GĚRENS en octubre de 2023.
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